Publicado por: Paúl Miguel Ortega González, en Oct 22, 2020
El Pressing es una táctica muy utilizada dentro del fútbol. No hay partido en el que no se emplee, lo que sucede es que en ocasiones pasa desapercibido y en otras sí se ve en máxima intensidad. Existe un gran número de personas a las que les gusta el fútbol y lo practican, pero aún no entienden muy bien qué significa el Pressing. Basicamente es una acción (individual o de conjunto) de hostigamiento sobre las posiciones contrarias, para permitir el pronto recupero del balón, acelerando la marca sobre él/los rivales y buscando que el apresuramiento en su accionar termine haciéndole/s perder la posesión de la pelota.
Es una intervención personal. Requiere gran inclinación para la marca y aptitudes de recuperación y quite propias de la función defensiva. Hoy pocos equipos hacen marca personal.
Este tipo de pressing es una acción realizada en conjunto, realizada inteligentemente y en los momentos propicios. Puede iniciarse a partir de una orden predeterminada (“ahora”, “arriba”, etc) o cuando se cumplen ciertas condiciones favorables. Es muy difícil hacerlo durante todo un partido por el nivel de concentración mental y esfuerzo físico que requiere, aunque en algunos equipos forma parte de su ADN.
El Inter de Helenio Herrera, el Estudiantes de La Plata de Zubeldía y la Selección de Holanda de 1974, aún con concepciones futbolísticas opuestas, fueron los ejemplos más paradigmáticos, pues aunaron a la presión para la recuperación de la pelota, con la ley del fuera de juego como alternativa, en los casos que el pressing no funcionara.
En el siglo XXI el nivel de presión se ha incrementado. Lo han hecho los equipos de Bielsa, lo han alternado los de Mourinho y ha sido el fantástico Barcelona de Guardiola quien le puso un sello personal al pressing alto realizado en la misma zona donde se perdía el balón. En la actualidad el pressing es una acción utilizada por los equipos de Jürgen Klopp (Liverpool), Hansi Flick (Bayern Munich), Marcelo Gallardo (River Plate), entre otros.
En estos casos el DT decide el lugar dónde se va a presionar. Puede ser ALTO (en la salida rival, o en posesión tras una pérdida), MEDIO (cuando la pelota llega a un defensor lateral o mediocampista de poco juego) o BAJO (poco usado y muy riesgoso, pues el error se puede pagar muy caro).
Condiciones para presionar:
Si alguna de estas premisas no se cumpliera, el equipo no debería presionar, seguiría esperando el momento oportuno.
Además, si la pelota va al arquero, no se lo presiona porque el equipo quedaría en inferioridad numérica.
El entrenador busca en este caso trabajar sobre él/los jugadores menos dotados del rival. Al jugador contrario elegido primero se lo deja libre y cuando recibe se lo presiona para forzarlo a cometer un error y así poder recuperar el balón.
El pressing no puede hacerse en forma anárquica. Todo el equipo debe estar atento y preparado para realizarlo, aunque no todos los jugadores participen de la acción inicial.
En general el pressing es una acción que se practica:
Es importante no ser gambeteado y quedar fuera de acción.
Se remarcó que la primera oposición al jugador rival que tiene la pelota, debe iniciar el pressing pero no debe intentar ganar el balón. Esta responsabilidad le cabe pues a los compañeros más cercanos, quienes una vez alcanzada la posición de marca sobre los rivales asignados, deben trabajar sobre el que lleva la pelota.
La utilización de la ley del off-side o fuera de juego es, como todas, una determinación táctica de cada entrenador. Tiene defensores y detractores. Los primeros ven en esta acción un ahorro de energías para el equipo que la ejecuta, por no tener que concentrar todo el esfuerzo en la marca; y entienden que genera dudas al rival que ataca, por lo que se transforma en una acción sumamente efectiva y vistosa.
Los detractores sostienen que es una acción muy riesgosa, que cada error significa poner al atacante rival de cara a la portería, que por ese motivo genera situaciones claras de gol para equipos técnicamente inferiores que de otro modo difícilmente podrían obtener posibilidades tan favorables. Esta acción puede utilizarse en acciones de balón parado, cuando el rival tiene buenos cabeceadores o lleva demasiada gente a buscar el centro.